Green Almond Hotel 2*
Servicios principales
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Wi-Fi
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Servicios 24 horas
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Actividades
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Spa y relajación
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Prohibido fumar
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Agradable para niños
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Aire acondicionado
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Mascotas
Ubicación
El Green Almond Hotel Unawatuna, de 2 estrellas, ofrece sala de estar compartida y jardín y al jardín. Además, se encuentra a una distancia de 7 km de la Iglesia reformada neerlandesa. El hotel incluye WiFi en toda la propiedad.
Si te alojas en este hotel, podrás descubrir la Pagoda de la Paz Japonesa, situado a 10 minutos en coche, o visitar instalaciones deportivas como el Estadio Internacional de Críquet de Galle, situado a unos 15 minutos en coche. Los huéspedes pueden visitar la Mihiripena beach, que está a tan solo 5 minutos a pie, y Reloj de torre, que está a unos 7 km del hotel Green Almond Unawatuna. Los amantes de la naturaleza apreciarán que la Wijaya Beach está a 900 metros. En los alrededores, podrás disfrutar de la experiencia cultural que ofrece el Fuerte de Galle, situado a 7 km del Green Almond Hotel. Para los que viajan desde lejos, el aeropuerto Koggala está a 10 minutos en coche.
Las habitaciones de este alojamiento están equipadas con una plancha y tabla de planchar, climatizador, así como minibar. Los cuartos de baño, equipados con un bidé, un inodoro separado y una ducha, también proporcionan a los huéspedes secador de pelo y toallas.
El restaurante el Runcible Spoon está a 5 minutos a pie del hotel y ofrece comida de Sri Lanka.
Reseña de un crítico de hotel
Durante mi reciente visita al Green Almond Hotel, quedé cautivado por la comodidad y el estilo acogedor de mis habitaciones. La cama era increíblemente confortable y contaba con aire acondicionado, algo que es un lujo en climas cálidos. La terraza del hotel, con vistas a la jungla de palmeras, se convirtió en el lugar perfecto para disfrutar de un buen vino al atardecer junto a mis amigos, creando momentos inolvidables. El desayuno, servido en la azotea, era una maravilla: opciones continentales y buffet que revitalizaban el cuerpo para un día de exploración en la cercanía de la playa de Dalawella. Además, la atención del personal fue excepcional; la dueña me recibió con la calidez que solo un buen anfitrión español podría ofrecer. Sin duda, este hotel me dejó una experiencia gastronómica y de estancia única en la costa.
